
Parece una pregunta extraña, pero lejos de esto, si reflexionamos un poco nos podemos dar cuenta de que el agua es transparente, en cambio la nieve es blanca. Por tanto, preguntarnos por qué la nieve es blanca tampoco debería ser tan horrible, incluso viene siendo una pregunta totalmente lógica. La nieve está formada por cristales de hielo, y justamente entre estos cristales de hielo hay oxigeno, algo que no debería decirnos nada, hasta que sabemos que este oxigeno hace que se difunda la luz, y por tanto, en realidad no estamos viendo algo blanco, más bien la difusión de la luz que se convierte en ese color blanco tan característico de la nieve.
Sin duda, por qué la nieve es blanca es una de las preguntas más habituales que nos pueden hacer cuando tenemos hijos o estamos en grupos de amigos que sean simpáticos y les guste este tipo de adivinanzas. En el fondo la pregunta de por qué la nieve es blanca es fácil de resolver, la luz blanca que vemos proveniente de la dispersión que produce el aire entre los cristales de la nieve. Es así de simple a la vez que hermoso, por eso si cogemos un puñado de nieve con las manos y lo apretamos, poco a poco va perdiendo si color blanco, y de igual manera, cuando se empieza a descongelar y perder su estado material, también se va cambiando el color. Por ejemplo es habitual que cuando se deshace la nieve en el barro, la nieve coge el color del barro, por tanto marrón.
También existen otos casos divertidos con esto de la nieve blanca, por ejemplo los osos polares. Todos tenemos la imagen de la gran piel blanca de los osos polares, pero en realidad sus pelos no son de color blanco, igual que la nieve en realidad son transparentes, pero el pelo lo tiene hueco y lleno de aire, lo que hace que de nuevo se difunda la luz con ese color blanco como la nieve, en un ejemplo de adaptación al medio para poder sobrevivir.
Muchas veces las preguntas más interesantes son aquellas que ponen a prueba los elementos más habituales que tenemos delante de nosotros, haciendo que dudemos de todo aquello que teníamos pensado y que pensábamos que no podía ser del todo interesante. Por ello, este tipo de preguntas como por qué la nieve es blanca hacen pensar y poner en evidencia a nuestros pequeños, haciendo que sean del todo necesario para el desarrollo de una correcta actitud pedagógica en nuestros más pequeños de la casa.